La provincia de Córdoba se caracteriza por tener una gran cantidad de destinos distribuidos en sus diversos valles con hermosos paisajes para descubrir y excelentes circuitos culturales e históricos para disfrutar durante todo el año. En esta guía para recorrer los valles de Córdoba te contamos qué hacer, cómo recorrerlos y qué esperar de cada destino.
1) Valle de Traslasierra
El Valle de Traslasierra se encuentra al oeste de la ciudad de Córdoba y partiendo desde la capital cordobesa se accede por el Camino de las Altas Cumbres, por la Ruta Nacional No. 20. Es un destino recomendado para el descanso y la recreación.
Esta zona está muy asociada a la figura del Cura Brochero, un sacerdote católico que fue pionero en las comunicaciones de la región que estaba antiguamente aislada. El único santo argentino recorrió incansables veces el camino de los puentes Colgantes, un camino de ripio que va desde El Cóndor hasta Copina y no llegó a ver con vida el camino actual pero fue uno de los precursores en su construcción. Hoy en día este es uno de los tramos más famosos del mundo que se recorre en el Campeonato Mundial de Rally.
Además el Valle de Traslasierra, al estar atravesado por numerosos ríos y arroyos, se destaca por la posibilidad de practicar deportes náuticos como windsurf, kayak, remo y pesca deportiva. El río Mina Clavero, elegido como una de las siete maravillas naturales de Argentina, y el río Panaholma son los más visitados por los turistas durante el verano ya que se refrescan en sus aguas y balnearios.
En esta región se destacan Villa Dolores y Mina Clavero como los centros urbanos más importantes y se concentran más de 20 localidades turísticas como Nono con el Museo Multifacético Rocsen, Cura Brochero con su parque temático religioso, San Javier y Villa Las Rosas (muy famosa por su feria artesanal); todas rodeadas de un entorno propicio para el turismo de aventura.
Por último, en este Valle se encuentran tres de las áreas naturales protegidas más importantes de la provincia, ideales para realizar caminatas, avistaje de aves y cabalgatas: El Parque Nacional Quebrada del Condorito, la Reserva Hídrica Pampa de Achala y la Reserva Natural Chancaní.
2) Valle de Calamuchita
El segundo destino de esta guía de valles de Cordoba es el Valle de Calamuchita. Ubicado a sólo 80 kms al sur de la capital cordobesa y se accede por la Ruta Provincial No. 5. Enmarcado por las Altas Cumbres en las que sobresale el Cerro Champaquí -el pico más alto de ellas- se destaca por la combinación de paisajes serranos, arquitectura centroeuropea y excelente gastronomía. Además es uno de los valles más completos en cuanto a la infraestructura turística ya que cuenta con todos los servicios que los viajeros necesitan, con una calidad distintiva en un entorno natural donde predomina la tranquilidad.
Esta zona se caracteriza por tener diques, embalses y ríos que son visitados por las familias para disfrutar de sus paisajes arbolados y realizar actividades náuticas como pesca, windsurf y canotaje. Entre las localidades turísticas que se destacan están Villa General Belgrano con una afluencia de inmigrantes centroeuropeos –en particular suizos y alemanes– que se traduce en su arquitectura alpina, festividades y recetas típicas para degustar y La Cumbrecita, a sólo 38 kms; único pueblo peatonal del país donde sólo los residentes pueden entrar con autos. Al visitarla, no hay que dejar de conocer La Cascada, una caída de agua de siete metros de altura que termina en una refrescante olla. En las cercanías hay varias localidades más tranquilas a la hora de hospedarse como Villa Berna, Villa Alpina (aquí se inicia la excursión tradicional al Cerro Champaquí), Los Reartes, El Durazno, Yacanto y Atos Pampa, llenos de rincones para disfrutar de la naturaleza.
Y para aquellos viajeros que les interesa la historia, aunque geográficamente está ubicada en el Valle de Paravachasca, la ciudad de Alta Gracia es un circuito muy recomendable por su riqueza histórica y que se ubica a sólo 45 kms al norte de General Belgrano. Conserva un legado jesuita y en un viaje por esta ciudad no puede faltar la visita por el Museo Nacional Estancia Jesuítica y Casa del Virrey Liniers, desarrollado en una las cinco estancias jesuíticas que fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Además aquí se encuentra la Casa Museo del Che Guevara donde en sus diferentes salas se muestran las vivencias de la infancia y adolescencia de este emblemático personaje de la política del siglo XX que vivió en estas tierras. Entre los elementos más importantes está la bicicleta con la que realizó su primer viaje a gran parte de los países de Latinoamérica.
3) Valle de Punilla
Al oeste de la capital cordobesa y limitado por los cordones de las Sierras Grandes se encuentra el Valle de Punilla. Se accede por la Autopista Justiniano Posse hasta la ciudad de Villa Carlos Paz, la puerta de entrada al valle y luego hay que tomar la Ruta Nacional No. 38, para acceder al resto de las localidades de la zona.
Se trata de uno de los valles más desarrollados en toda la provincia y uno de los centros turísticos más importantes de Argentina. La región gira en torno a Villa Carlos Paz y se ha vuelto un destino obligado que atrae por sus ríos cristalinos, balnearios y playas y por su agitada vida nocturna con teatros y discotecas. En los meses de verano las orillas del Dique San Roque y el río San Antonio son los lugares más buscados como los poblados de San Antonio, Icho Cruz, Cuesta Blanca o Cabalango que ofrecen diferentes opciones de balnearios y zonas de camping.
Además otros lugares que se pueden visitar son Cosquín, la tradicional Capital Nacional del Folclore y hogar del festival más importante de la música tradicional argentina; Santa María de Punilla, la localidad del Cosquín Rock; La Falda con su emblemático Hotel Edén y el Festival Nacional de Tango y La Cumbre una colonia inglesa que se caracteriza por sus pintorescas casas de té y donde se pueden practicar deportes aéreos como paracaidismo y parapente.
Para quienes buscan hacer trekking y respirar aire puro, la localidad de Tanti es la puerta de ingreso al Cerro los Gigantes y en Capilla del Monte se puede realizar el ascenso al místico y energético Cerro Uritorco.
Por último, nuestra recomendación para visitar el Valle de Punilla es hacer base en una ciudad y desde allí salir a recorrer otros lugares en distintos días. Por ejemplo, si vas en busca de vida nocturna y más movimiento lo mejor es hospedarte en Carlos Paz; en cambio, si preferís más tranquilidad aconsejamos alojarse en La Cumbre.
¡Recorrer los valles de Córdoba es una opción ideal tanto para quienes buscan actividades de turismo aventura como para los viajeros que prefieren relajarse disfrutando de los sonidos de la naturaleza y admirando los paisajes maravillosos que nos regala esta provincia!